En la Fundación Ojos de Mar, hemos observado de primera mano los impactos devastadores que los plásticos de un solo uso tienen en nuestros ecosistemas costeros, especialmente en las playas de Llolleo y las lagunas que rodean esta zona. Cada día, las aves y otros seres vivos enfrentan amenazas crecientes debido a la contaminación por plásticos. Por ello, queremos expresar nuestro apoyo contundente a la plena implementación de la Ley de Plásticos en Chile y manifestar nuestra preocupación por los intentos de dilatar el cumplimiento adecuado de esta crucial normativa.
El reciente estreno del reportaje “La Ley de Plásticos que McDonald’s no quiere”, producido por la ONG Oceana en colaboración con UChile TV, ha revelado el intenso lobby llevado a cabo por Arcos Dorados, operador de McDonald’s en América Latina, junto con la Asociación Chilena de Gastronomía (ACHIGA), para modificar la normativa que regula la entrega de plásticos desechables en locales de expendio de alimentos. Este esfuerzo por cambiar la ley representa un grave retroceso en las acciones por un ambiente más limpio y saludable.
¿Nuestras poblaciones, ecosistemas y biodiversidad pueden seguir esperando más años de contaminación?
Es alarmante ver cómo las mismas tácticas empleadas en Europa, que incluyeron la financiación de estudios a medida y campañas de desinformación, están siendo replicadas en Chile. El lobby en Europa logró debilitar una normativa similar, y ahora esa misma estrategia amenaza con socavar nuestros avances en la reducción de residuos plásticos. Los estudios financiados por McDonald’s, que pretenden demostrar que la reutilización es peor para el medio ambiente, han sido ampliamente refutados por científicos que destacan la falta de rigor y validez en dichos informes.
En este contexto, es vital que nuestros Diputados y Diputadas no caigan en la trampa del lobby industrial ahora que el proyecto pasa a sala de la cámara. La dilación de la Ley de Plásticos no solo permitiría la intensificación de estas presiones, sino que también pondría en riesgo la salud de nuestros ecosistemas marinos y costeros. “Es preocupante que el gobierno haya decidido dar urgencia a un proyecto que recoge las demandas del sector gastronómico, en lugar de priorizar la protección del medio ambiente y la salud pública, gobierno que al parecer no ve como poblaciones y ecosistemas sufren cada día más con los vertederos, microbasurales sin control y llenos de plásticos de un solo uso”
Como Fundación, instamos al Gobierno y a nuestros representantes en el Congreso a mantener su compromiso con la protección ambiental. No podemos permitir que los intereses comerciales prevalezcan sobre la necesidad urgente de reducir la contaminación plástica que afecta a nuestras comunidades y a la biodiversidad de nuestras costas. La implementación de la Ley de Plásticos debe seguir adelante sin más demoras, y cualquier intento de retroceder en esta legislación debe ser firmemente rechazado.
En nuestra labor diaria, vemos cómo los plásticos desechables impactan negativamente en la fauna y flora de los humedales costeros y las playas de Llolleo. Cada pedazo de plástico que no llega a nuestros océanos gracias a esta ley es una victoria para el medio ambiente. Debemos trabajar juntos para asegurar que nuestras leyes reflejen un verdadero compromiso con la sostenibilidad y el bienestar de nuestras comunidades y ecosistemas. Por esto, hacemos un llamado a la acción para defender y proteger nuestra ley de plásticos de cualquier intento de intervención y debilitamiento.
Fundación Ojos de Mar Protegiendo la playa de Llolleo y los humedales costeros
“ Es preocupante que el gobierno haya decidido dar urgencia a un proyecto que recoge las demandas del sector gastronómico, en lugar de priorizar la protección del medio ambiente y la salud pública, gobierno que al parecer no ve como poblaciones y ecosistemas sufren cada día más con los vertederos, microbasurales sin control y llenos de plásticos de un solo uso”